Poner en valor la necesidad de ofrecer un ambiente de mediación literaria dentro del ámbito de las bibliotecas.

Dar importancia al establecimiento de un triángulo amoroso para reafirmar el vínculo entre literaturas, adultos y chicos y chicas.

Conceder tiempo y dedicación al acto de seleccionar las literaturas por su calidad, su temporalidad, la adecuación en las diferentes épocas lectoras, la ordenación del material de que se dispone.

Estar atentos al que se publica, pero también en los lectores a quienes se destinan las publicaciones.